(Kuala Lumpur, Malasia- 23/02/04). En el día de hoy dieron inicio en Kuala Lumpur, Malasia, las negociaciones de Naciones Unidas sobre Organismos Genéticamente Modificados (Transgénicos) en el marco del Protocolo de Bioseguridad. Amigos de la Tierra Internacional exhorta a todas las Partes que han ratificado este Tratado de Naciones Unidas a adoptar reglas estrictas tendientes a proteger a los ciudadanos del mundo y al ambiente de los riesgos asociados a los cultivos y alimentos transgénicos.
El principal obstáculo es el gobierno de EE.UU. y sus aliados pro transgénicos: Argentina, Canadá y otros miembros del Grupo de Miami*. Estos países promueven normas débiles que atentan contra el derecho de los consumidores a saber qué están comiendo y no permiten proteger a los ciudadanos y al ambiente.Juan López de Amigos de la Tierra comentó que «una vez más Estados Unidos está boicoteando un acuerdo multilateral y está tratando de imponer sus propias normas al resto del mundo. La experiencia con los cultivos transgénicos en los últimos diez años muestra que no se puede garantizar que sean seguros y -de hecho- han generado serios problemas como la contaminación genética. El mundo necesita en forma urgente una ley internacional que obligue a las empresas de biotecnología a hacerse responsables por los daños».
Karin Nansen de REDES AT Uruguay, coordinadora de la campaña de Amigos de la Tierra Internacional en América del Sur, manifestó que: «una vez más un pequeño grupo de países está poniendo en jaque el futuro del sustento de nuestros pueblos, la agricultura y la alimentación en el mundo. Cuando ya se ha demostrado que la contaminación genética es una realidad que afecta y amenaza a los pueblos indígenas, comunidades campesinas, a la biodiversidad y la agricultura; los intereses económicos de las grandes empresas transnacionales se imponen por encima de nuestro derecho a la soberanía y seguridad alimentaria y a un ambiente sano. Uruguay una vez más actúa como lacayo de EE.UU. sumándose a la estrategia de presionar a los demás países del Tercer Mundo para que acepten las reglas de juego de la potencia del Norte y de sus empresas biotecnológicas».
Amigos de la Tierra plantea que todas las empresas o entidades biotecnológicas que hayan liberado transgénicos en el ambiente deben ser obligadas a asumir su responsabilidad legal y económica por los daños provocados al ambiente, la salud humana y el sustento de campesinos y ciudadanos.
Esos daños ya son una realidad y mientras la mayoría de los países en desarrollo considera absolutamente necesario crear un régimen internacional vinculante que obligue a las empresas a hacerse cargo de los mismos, EE.UU., Canadá y Argentina -los principales productores de transgénicos del mundo- se oponen a un régimen de ese tipo.
Los productos procesados que contengan transgénicos también deberían ser identificados claramente y etiquetados para que los consumidores tengan la posibilidad de decidir si consumirlos o no.
Pero la coalición liderada por Estados Unidos -en la que también participa Uruguay- se opone a que los transgénicos sean claramente identificados y está presionando a los países para que firmen acuerdos multilaterales y acepten normas débiles.
México -una de las Partes del Protocolo de Bioseguridad- ya ha firmado un acuerdo con EE.UU. y Canadá que impedirá que los ciudadanos mexicanos sepan si los alimentos que consumen contienen transgénicos o no.
Estados Unidos ya se ha dirigido a otros países como Japón, China y Corea del Sur para convencerlos de que acepten normas débiles.
Amigos de la Tierra realizó una acción frente al Centro de Convenciones de Kuala Lumpur -donde se realiza la reunión del Protocolo en Bioseguridad- donde se exhibió un maíz transgénico gigante, de 6 metros de altura, para exhortar a los gobiernos a que aprueben normas estrictas legalmente vinculantes para poner freno a la contaminación transgénica.
Por más información:
En Kuala Lumpur (Malasia),
Juan López, Amigos de la Tierra Internacional.
Tel: +60-123952149 o +39-333-1498049
juan.lopez@foeeurope.org
Karin Nansen, REDES, Amigos de la Tierra Uruguay
+ 603 21412000 (int. 601)
nansenkarin@yahoo.com
urusust@redes.org.uy
*El Grupo de Miami es un grupo de países creado a instancias de Estados Unidos durante las negociaciones del Protocolo de Bioseguridad para impedir que se llegara a un acuerdo que pusiera límites a la imposición de los tránsgenicos en el mundo. Sus miembros eran Estados Unidos, Canadá, Australia, Argentina, Chile y Uruguay.