Hoy presenciamos escenas extraordinarias en las calles de Hong Kong luego del intento de Lamy de orquestar las negociaciones ministeriales en un texto de consenso. El paquete en borrador continúa siendo un desastre para el desarrollo y debería ser rechazado por el mundo en desarrollo. Todos los elementos objetables del texto permanecen allí «incluyendo los subsidios a las exportaciones y las ayudas internas que distorsionan el comercio, el Anexo C sobre servicios y un enfoque agresivo de liberalización industrial. El paquete de desarrollo continúa vacío y constituye un insulo para los países en desarrollo. El texto será discutido en la Sala Verde esta noche, al tiempo que circulan todo tipo de rumores en relación a la dirección que tomará el último día de la Conferencia Ministerial. Ciertamente Venezuela parece estar fuertemente posicionado en su oposición al Anexo C, pero aparentemente algunos aliados han suavizado sus objeciones. Hoy tuvo lugar otra acción colorida en el Centro de Convenciones para recordarle a los delegados que tienen dos opciones frente a ellos para elegir» o vender sus servicios o rechazar la privatización.