El “Movimiento Nacional en Defensa de la Tierra” de Uruguay busca enmendar la Constitución para evitar la extranjerización de la tierra.
El boom de la soja, que en esta cosecha llegó a cubrir unas 650 mil hectáreas, superando en 150 mil las del año anterior, así como el de la forestación con destino a la industria de celulosa, ha incentivado notablemente la compra de tierras en Uruguay por parte de empresas del agronegocio.
Ante ello el “Movimiento Nacional en Defensa de la Tierra”, integrado por pequeños productores de varias zonas del país viene recolectando firmas para forzar una Reforma Constitucional con dos objetivos, que relató uno de sus integrantes Julián Cabrera, del departamento de Florida: “Se busca simplemente introducir dos artículos: el primero es que, respetando los derechos adquiridos, sin carácter retroactivo, desde que se apruebe la reforma constitucional, los únicos habilitados a comprar tierras sean el Estado o los ciudadanos naturales o legales residentes. No es un tema de raza, es un tema de que sean personas físicas con nombre propio y para eso tienen que estar radicados acá”.
La segunda modificación establece que por ley se fijará el máximo de tierras que pueda concentrar una misma persona física. “No se trata de poner un papel cuadriculado sobre el mapa”, aclara Cabrera. “Somos muy respetuosos de las instituciones democráticas pero creemos que a los gobernantes a veces hay que arrimarles la fusta. Que lo hagan ellos, que lo hagan bien y para eso les incluimos el mandato constitucional”, comentó.
Este Movimiento cuenta con papeletas para ser firmadas y, de obtenerse un 25% del padrón de habilitados para votar con fecha abril de 2009, se sometería la reforma constitucional a referéndum coincidentemente con las elecciones nacionales de octubre.
Radio Mundo Real dialogó con Cabrera sobre las características de esta campaña.
Nota publicada en Radio Mundo Real el 5 de enero. La puede leer y escuchar en: http://www.radiomundoreal.fm/rmr/?q=es/node/26952