La demanda creciente y las nuevas tecnologías disponibles para la exploración y explotación de bienes naturales ya sea minerales o combustibles fósiles, hacen variar los difusos límites de su disponibilidad. Esta variabilidad en los cálculos de las reservas existentes es uno de los principales factores que inciden en la generación y la estructura de los diversos discursos actuales sobre la minería. Dependiendo del desempeño territorial e histórico de la sociedad local, el tipo de mineral a explotar, la tecnología usada y del tamaño de los emprendimientos mineros, se generan diferentes impactos socio-ambientales negativos, así como distintas conceptualizaciones sociales respecto a la actividad minera.